Es como peinarse con el pelo seco.
Y ya fuimos a Chascomús, y ya fuimos a Uruguay, al país de Enzo Francescoli, de Nati Oreiro, de Rubén Rada, de Benedetti, de Pepe Mujica, de dos bandas de rock que andan volando por unos lindos aires. El país del charco, la comparsa y el mate.
Ojotas no se apersonó aquella vez que Minga lo esperaba para ir a comprar el ténder. Nunca se charló. Fue y es un tema tabú. Un tema tabú es siempre un tema tabú. No se cita. No se hace referencia y se esquivan (ole. ole. ole).
Y ya, cuando hay un tema tabú es porque hay una prohibición de algo natural. Ojotas no dio explicaciones y lo peor de todo es que Minga no las pidió, suponemos que por miedo. Como es un tema prohibido respetamos la decisión de los protagonistas y mantenerlo en la sombra, es decir no sacar los trapitos al sol. Es como si lo dejáramos fuera de foco o fuera de campo.
Lo que está en campo es un mail de Jack. Jack está en acción. Hola! (y una carita feliz) empezaba el e-mail. Cómo estás linda? Decía en el cuerpo del mail. Espero noticias tuyas, concluía Jack, que estaba en su taller. Recordemos que Jack trabajaba haciendo ropa para muñecos, para juguetes, el siempre quisó ser Ken. Pero ese, es otro tema.
Minga se puso contenta por el e-mail. Si, la verdad es que estoy contenta - se dijo a sí misma.
Minga contestó y después de unos e-mails, que no voy a contar, o sea voy a hacer una elipsis. Voy a ocultar un poco de información. Sigo. Después de unos e-mails quedaron en verse, se citaron en un bar muy bonito, un bar cálido. Jack pidió un jugo de zanahorias y Minga una limonada con mucho hielo.
Minga brillaba (shine, shine, shine). Salvo el pelo, porque se había peinado en seco y el pelo había quedado inflado, con elevaciones intermitentes que iban de arriba hacia abajo y de abajo hacia arriba. Jack estaba muy lindo, con una camisa rayada y un jean, que no era tela de jean.
- Qué linda que estás.
Minga se puso roja como un semáforo en stop, como la colección de libros de Bayer de página 12, como cuando un niñito pinta un corazón.
- Gracias (y miró para el piso)
- ¿Y yo, yo estoy lindo?
Justo Minga estaba tragando limonada y puso una cara extraña, mientras decia que si.
Y ya fuimos a Chascomús, y ya fuimos a Uruguay, al país de Enzo Francescoli, de Nati Oreiro, de Rubén Rada, de Benedetti, de Pepe Mujica, de dos bandas de rock que andan volando por unos lindos aires. El país del charco, la comparsa y el mate.
Ojotas no se apersonó aquella vez que Minga lo esperaba para ir a comprar el ténder. Nunca se charló. Fue y es un tema tabú. Un tema tabú es siempre un tema tabú. No se cita. No se hace referencia y se esquivan (ole. ole. ole).
Y ya, cuando hay un tema tabú es porque hay una prohibición de algo natural. Ojotas no dio explicaciones y lo peor de todo es que Minga no las pidió, suponemos que por miedo. Como es un tema prohibido respetamos la decisión de los protagonistas y mantenerlo en la sombra, es decir no sacar los trapitos al sol. Es como si lo dejáramos fuera de foco o fuera de campo.
Lo que está en campo es un mail de Jack. Jack está en acción. Hola! (y una carita feliz) empezaba el e-mail. Cómo estás linda? Decía en el cuerpo del mail. Espero noticias tuyas, concluía Jack, que estaba en su taller. Recordemos que Jack trabajaba haciendo ropa para muñecos, para juguetes, el siempre quisó ser Ken. Pero ese, es otro tema.
Minga se puso contenta por el e-mail. Si, la verdad es que estoy contenta - se dijo a sí misma.
Minga contestó y después de unos e-mails, que no voy a contar, o sea voy a hacer una elipsis. Voy a ocultar un poco de información. Sigo. Después de unos e-mails quedaron en verse, se citaron en un bar muy bonito, un bar cálido. Jack pidió un jugo de zanahorias y Minga una limonada con mucho hielo.
Minga brillaba (shine, shine, shine). Salvo el pelo, porque se había peinado en seco y el pelo había quedado inflado, con elevaciones intermitentes que iban de arriba hacia abajo y de abajo hacia arriba. Jack estaba muy lindo, con una camisa rayada y un jean, que no era tela de jean.
- Qué linda que estás.
Minga se puso roja como un semáforo en stop, como la colección de libros de Bayer de página 12, como cuando un niñito pinta un corazón.
- Gracias (y miró para el piso)
- ¿Y yo, yo estoy lindo?
Justo Minga estaba tragando limonada y puso una cara extraña, mientras decia que si.
5 comentarios:
Limonada, lo mejor!
Jack is back?!
Siempre me gustó más Jack.
A mi tb! lo peor es peinarse en seco pobreee minga, no enteinde nada
Jugo de zanahoria!!! jajajajaja
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